El éxito de vender emociones y no productos
Percibimos el mundo a través de los sentidos, gracias a estos creamos emociones y generamos experiencias. Las grandes marcas y las marcas en general ya no venden productos, venden experiencias que el consumidor percibe en su mente y guarda en su corazón. La razón está en que nuestras decisiones están predeterminadas inconscientemente mucho tiempo antes de que nuestra propia conciencia las ponga en marcha, así lo demuestra un estudio llevado a cabo por neurocientíficos del Centro Bernstein de Neurociencia Computacional de Berlín, en Alemania, en donde se escanearon los cerebros de 14 individuos mientras éstos tomaban una decisión sencilla de compra. Localizaron con total precisión señales concretas de actividad cerebral hasta 10 segundos antes de que los participantes se dieran cuenta de su propia elección.
Si el subconsciente del ser humano influye altamente en la toma de decisiones ¿Cómo estamos nosotros conectando con el subconsciente de nuestro consumidor?
La respuesta en mi concepto es: interacción, el consumidor debe sentirnos además de vernos, muchas marcas abogan por el sentido de la vista y dejan a un lado los demás sentidos del ser humano, un claro ejemplo de ello, la publicidad digital con la que somos bombardeados diariamente. Si les preguntara, de todos los anuncios que vieron hoy en su computador, ¿Cuántos puede recordar con claridad? Muy probablemente la respuesta es: «casi ninguno», y si muchas veces recordamos anuncios es por el grado de interactividad que nos brindaron, un ejemplo de anuncio digital interactivo puede ser aquel que le permita al usuario jugar, incluso existen los anuncios en los que el usuario puede probar las marcas, cuando el consumidor interactúa con la marca, por más pequeña que sea dicha interacción ya está viviendo experiencias.
Un ejemplo claro de interacción directa con el consumidor lo podemos encontrar en Disney, su lema principal es «Wearing our guests shoes», su concepto de marketing es pensar y actuar como un usuario, cada una de las experiencias que nos transmite Disney fue previamente evaluada bajo el punto de vista del consumidor.
¿Qué le gusta a mi consumidor? ¿Cómo interactúo más con él? ¿Cómo generar recordación?
No compramos productos, invertimos en experiencias
Diferentes estudios coinciden en que las personas, de manera inconsciente, invierten en experiencias más que en productos, así que por más cualidades que posea mi artículo de venta, si no genera una emoción en mi consumidor, no lo comprará.
¿Cómo interactuó con mi consumidor, hay innumerables ejemplos, pero un elemento clave es la INNOVACIÓN, me permito escribirlo con letras mayúsculas porque la creatividad aquí es esencial. No hay límites a la hora de dejar volar la imaginación (sin dejar de lado el tema presupuestal), ideas sencillas pueden generar grandes resultados, lo importante es generar experiencias omnicanal (offline/online) en el consumidor, estimular los sentidos y las emociones de las personas para crear en ellas una experiencia única que solo podrá conseguir con dicha marca.
Un gran aliado a la hora de acercarse al consumidor, son las activaciones de marca, estas pueden llevarse a cabo en eventos de diferente índole, conciertos, lanzamientos o simplemente un día cualquiera en lugares públicos. Las activaciones no solo nos permiten la INTERACCIÓN directa con nuestro consumidor, si no que nos abren las puertas a los medios de comunicación, podemos ser tendencia de grandes redes sociales, les puedo asegurar que las personas que interactuaron con nuestra marca, jamás la olvidarán, la seguirán comprando y se convertirán en nuestros embajadores de marca.
«Puedes olvidar lo que te dijeron, pero nunca cómo te hicieron sentir», esta frase define la esencia del marketing experiencial, cuyo objetivo es a través del estímulo de los sentidos despertar un sinfín de emociones y sentimientos. ¿Y tú, cómo logras conectar la mente y el corazón de las personas con tu marca?
FUENTE: www.puromarketing.com